En primer lugar, hay que tener en cuenta que las alfombras están hechas con fibras naturales y, por tanto, vivas; por ello es importante que les dé la luz, aunque no es conveniente el sol directo, que pueden quemar los colores. Es muy perjudicial la humedad, ya que las pudre.
Debe evitarse colocar un mueble muy pesado sobre la alfombra, porque aplastaría los pelos y luego es muy difícil volverlos a su ser. Las manchas de barro se dejarán secar y posteriormente se barrerán. Las manchas de tinta se quitarán frotando leche caliente con una balleta suave. Si la alfombra es nueva, es normal que suelte pelo durante una temporada, esto se debe a la borra de la lana. Si la alfombra va colocada sobre un suelo deslizante para evitar caídas y resbalones es conveniente colocar cintas de caucho en su anverso.
Conservación de las alfombras
junio 30, 2013 | Author: admin
Categoría: Alfombras
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