Si vas recogiendo flores silvestres cada vez que sales al campo, guárdalas para decorar tu casa. Una buena idea es colocarlas dentro de unos frascos de cristal. Pero ten cuidado, porque sus tallos son muy delicados. Lo único que tienes que hacer es pintar la tapa y hacerle un par de agujeros con un taladro. Llena los botes de agua hasta la mitad y mete una flor en cada agujero.