Separada por unos pufs se encuentra una segunda zona de estar. Los muebles son ingleses y los cuadros fueron pintados por Alfonso. Una vez más, encontramos un ejemplo en el que lo clásico y lo moderno combinan entre sí a la perfección, como si de una misteriosa atracción se tratara. La ventana se vistió con unas cortinas de loneta y un estor a juego de Gastón y Daniela.