Original pareja de columnas del más rico barroco castellano, siglo XVII. Madera tallada y dorada, decorada con abundante vegetación, frutos y hojas de acanto que todavía conservan impecable su policromía original. Estas dos piezas formaban parte del retablo de un altar de la iglesia de Gumiel de Hizán (Burgos). Tienen una longitud de 136 cm.